
El objetivo es mejorar la calidad del aire
Vigo comienza a tramitar esta semana su zona de bajas emisiones. El objetivo es mejorar la calidad del aire reduciendo los ruidos y las emisiones de gases de efecto invernadero. El primer edil anunció que la Junta de Gobierno Local dará luz verde este viernes a la propuesta. Se abrirá un periodo de veinte días para que la ciudadanía, las organizaciones y las asociaciones que lo deseen puedan hacer llegar al Ayuntamiento sus opiniones. Posteriormente se iniciará la redacción de la ordenanza. La consulta pública estará habilitada en la web del Ayuntamiento de Vigo.
La Ley recoge que los municipios de más de 50.000 habitantes adoptarán antes de 2023 planes de movilidad que incorporen medidas para reducir las emisiones del transporte, entre estas, las zonas de bajas emisiones. El gobierno de Vigo, afirmó el alcalde Abel Caballero, podría delimitar varias.
Los objetivos, explicó Caballero, pasan por mejorar la calidad de aire y la salud de la ciudadanía. También por reducir el ruido y las emisiones, por mitigar los efectos del cambio climático, generar modelos más sostenibles y conseguir una mejor eficiencia energética.
Las zonas de bajas emisiones, aseveró el alcalde, son instrumentos de gestión de la movilidad. Con ellos se busca ayudar a promover una transición a modos de transporte más sostenibles y el uso de vehículos alternativos de bajas emisiones.
En esta línea, el alcalde destacó que la ciudad ya cuenta con instrumentos de gestión de la movilidad que apuestan por el cambio de modelo. Las rampas mecánicas, los ascensores y escaleras del Vigo Vertical y el carril bici o la nueva ordenana de patinetes afianza esa línea.
El Ayuntamiento prevé adaptar su modelo al objetivo del Plan Integrado de Energía y Clima (2021-2030), que estipula una reducción de los desplazamientos urbanos en vehículo privado motorizado del 35% de pasajeros por kilómetro.