
El ayuntamiento obtiene más de 2 millones de euros de fondos europeos
La ZBE de Ciudad Real peatonalizará más de 12.000 metros cuadrados de calles. Lo ha asegurado la portavoz municipal, Mariana Boadella, que ha dado a conocer la aprobación provisional de ayudas para la Zona de Bajas Emisiones. Esta actuación obtendría más de 2 millones de euros de los Fondos Europeos. Las operaciones previstas son el sistema de control de accesos, la plataforma de gestión, la peatonalización sostenible de la calle Ciruela, la Plaza del Pilar, la Avenida del Rey Santo y el Pasaje Gutiérrez Ortega. También se contempla la peatonalización sostenible de las calles Juan II, Postas, Alfonso X, Reyes, Prado y Caballeros. En total la ZBE de Ciudad Real peatonalizará más de 12.000 metros cuadrados de calles.
Se trata, según ha explicado Boadella de “implantar una ZBE en el área interior de rondas y el control tecnológico para su gestión, apostar por una movilidad activa rediseñando el espacio urbano, peatonalizando de forma sostenible y ejecutando ejes peatonales conforme al Plan de Movilidad Urbana Sostenible. Por último, se quiere mejorar la calidad del aire, disminuir los niveles de contaminación acústica y reducir las emisiones de CO2 debidas al transporte”.
La portavoz del Ayuntamiento de Ciudad Real afirma que la intención es “establecer un cambio de hábitos en las ciudades”. En concreto las ayudas que se obtendrían, si se confirman, serían de 2.045.000 euros. 200.000 euros se destinarían al control de accesos, 425.000 euros serían para la plataforma de gestión y 650.000 y 770.000 euros se destinarían a la peatonalización de las calles.
Aparcamientos
Añadía Boadella que el equipo de gobierno trabajará sobre los aparcamientos disuasorios “ya hay un proyecto para la calle López Bustos”. También se han pedido ayudas a los Fondos para la Renaturalización de las Ciudades para habilitar otro aparcamiento en el Parque de Gasset”
Esta iniciativa mejorará la calidad del aire de la ciudad, como explicaba la portavoz del equipo de gobierno, ya que “los datos de los óxidos de nitrógeno están en una media anual de 19,6 microgramos por metro cúbico y la recomendación de la OMS (Organización Mundial de la Salud) es de 10. La contaminación atmosférica y la acústica siempre se pueden mejorar”. La previsión es que la ordenanza de bajas emisiones estuviera en enero de 2023, pero las limitaciones de acceso a ciertos vehículos se irán anunciando paulatinamente. Se pretende seguir un calendario que dará tiempo suficiente a todos los vecinos para ir adaptándose.